Amor por Malaga
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ArquitectosDaniel Moreno Flores, Javier Mera, José Manuel de los Ríos, Roy Nussbaum
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ColaboraciónJorge Ayala, David Rodríguez, Julieta Dentice, Sebastián Zapata, Sofia Zabaleta, Marie Combette y Nicolas Wagner
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InstalacionesIngeniería Del Pozo
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Año2020
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UbicacionEspaña / Malaga
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TipologiaHotel Boutique
Se trata de un edificio que ha encontrado riqueza en el entendimiento del paso del tiempo de sus paredes.
Esta ubicado en una ciudad cargada de mucha historia, entre sus calles y edificaciones se respira la nostalgia del pasado (Calle Ollerías, centro histórico de Málaga).
Esta es una construcción existente alrededor de 1850 en la que rescatamos como principales atributos; maderas que están cargadas de historia, con rasgaduras, destiñes y desgastes.
Y lo más revelador es la presencia de los ladrillos, que son propios del sistema de estructuración, ya que la mayoría son paredes portantes en una edificación de 4 plantas.
En el proceso de limpieza espacial, se retiraron paredes que habían sido incorporadas en los últimos años de materiales de menor calidad. Con estas acciones,
las paredes quedaron impregnadas de huellas humanas que han revelado el acto de quitar, con texturas especiales.
Este material rojo, rugoso e imperfecto nos remite y nos conecta con las ruinas de esta ciudad, como las estructuras culturales que han habitado esta ciudad desde hace mucho tiempo.
Esto nos brinda una arquitectura atemporal, cargada de energía y emoción.
El proyecto de integración busca el dialogo entre los tiempos, el reconocimiento de las acciones efectuadas generando un contraste de lo existente con lo nuevo.
El material principal incorporado es la madera contrachapada, esta es trabajada como grandes muebles que complementan al uso requerido.
La madera busca dar abrigo, seguridad y confort.
Todos los muebles buscan generar amplitud y limpieza espacial, por tal motivo estratégicamente siempre se ubican en los límites, permitiendo espacios diáfanos flexibles con versatilidad.
Camas que aparecen y desaparecen, espacios móviles que existen o se esconden y mesas que admiten uno o varios usuarios en diferentes momentos.
Al ser una edificación alargada y alta tiene poca incidencia de luz natural, este hecho nos ha permitido entender la riqueza espacial con la penumbra.
Como una manera de intensificación de la ruina, la luz indirecta que genera una ambientación vivencial y fenomenológica.
Esta circunstancia del lugar le dota de misticismo al espacio, la luz baña el ambiente gradualmente a través de un pozo de luz que recogerá frondosa vegetación y agua que regularizará el clima interior con frescura.
El proyecto se da como respuesta a una ciudad vibrante, mística, mediterránea, tradicional, contemporánea, llena de vida.